Nunca pensé que leería esto, pero sí, para 2012, y sólo durante 2012, España tendrá el honor de tener en su territorio el ordenador más potente del mundo. La razón no es otra que la estrategia de la Asociación para la Computación Avanzada en Europa(PRACE), una comisión de la Unión Europea, para quitarle terreno a EEUU en este campo, donde prácticamente desde siempre han mantenido el liderazgo.
La idea es que cada año y para ahorrar costes todos los países miembros pagan parte del dinero del superordenador que va a otro país. Así, Alemania será este año la que se ponga a la cabeza, que de hecho ya ha adquirido el suyo, en 2011 Francia, en 2012 España y posteriormente Italia.
Se instalará en el Barcelona Supercomuting Center y le costará 60 millones de euros al estado español. Servirá para realizar todo tipo de cálculos en todas las materias y aunque sea muy caro, también supone en cierto sentido una inversión a largo plazo por la cantidad de investigaciones científicas que se centrarán en Barcelona durante todo 2012 mientras ostente el récord de tener el superordenador más potente del mundo y posiblemente el único en el que determinados cálculos complejísimos puedan llevarse a cabo.